Presente. Qué palabra. Imagino que como últimamente está bastante de moda habrás escuchado la importancia del aquí y el ahora, del presente, del mindfulness, de la atención plena… Para mi tiene bastantes connotaciones, la primera, la de regalo. Recibir un presente, regalar un presente… poner la intención en alguien y en algo que genera sorpresa en el momento en el que se genera el intercambio. Esa sorpresa de no saber lo que está en el regalo, en el paquete, en la bolsa, en la sonrisa, en las palabras, en el encuentro… y sin embargo abrirnos a lo que pueda ser…  a lo que suceda, a lo que es, a lo que hay en ese momento…. Apenas son unos segundos desde que sabemos que vamos a recibir un presente, hasta que lo  recibimos, lo vemos, lo sentimos, lo respiramos, lo incorporamos en nuestra realidad dejándonos ser con ella…. Porque en ese momento, seguramente hasta nos hemos olvidado de nosotros mismos, de nuestra identidad, de cuántos años tenemos, de dónde hemos nacido, de qué hemos estudiado, o dónde hemos trabajado, de qué tipo de películas me gustan, de lo que quiero hacer a la mañana siguiente o al final del día… incluso de la ropa que llevamos puesta… nos hemos olvidado de nosotros, hemos desaparecido para estar presentes…

¿Sabías que la sorpresa es una emoción de las que se llaman básicas, como la tristeza, la alegría, el miedo, el asco y el enfado? Si la sorpresa es una emoción, y por lo tanto, es adaptativa, nos sirve para adaptarnos a lo nuevo, nos da un mensaje de que está sucediendo algo que no conocemos y hemos de adaptarnos. Sin embargo, ¿sabías que al cerebro le gusta lo conocido, lo rutinario, lo que se hace de una manera automática, lo que me ahorra energía aunque no sea lo que me convenga…? Si, si… es eso de lo que seguro que has oído hablar o que tú mismo conoces… la zona de confort; si… zona de confort, aunque no significa que sea confortable, ni que te guste, ni que sea lo que necesitas, ni siquiera que sea conveniente o beneficiosa para ti… Simplemente es. Conocida… y por ser conocida le concedemos el beneplácito de cederle el trono, el cetro, la capa y la corona y toda nuestra soberanía… porque “es lo que siempre ha sido” o “como se han hecho siempre las cosas…” o “más vale conocido que bueno por conocer…”, o “lo que a mi siempre me han dicho que tenía que ser…”

Bien, en estos instantes ya nos vamos dando cuenta que el presente, el no saber qué puede pasar en el momento siguiente, y el control con lo que va a suceder, la previsibilidad, la anticipación… son caminos bastante diferentes ¿verdad? De hecho, son caminos opuestos que en ocasiones pueden generarnos bastante conflicto.

¡Ah!  Disculpas al pasado, nos habíamos olvidado de él con tanto presente… y aquí, en este entramado de caminos a tomar, tiene su importancia, así es que vamos a darle su lugar: es lo que hice, no hice, dije, no dije, sentí, no sentí, pensé, no pensé…. respecto a algo que pasó quizás con otras personas, y sobre todo cómo yo lo viví y lo sigo viviendo, sintiendo y alimentando en una especie de noria o tiovivo que no cesa, que aparece en mis situaciones con esa musiquita particular que le asigné. Esa película que continúa pasando y pasando y pasando, sucediendo aunque sólo sea dentro de mi, y que me hipnotiza, insensibiliza y en cualquier caso, me separa de este momento en el que sucede y sobre todo puedo transformar la vida: el presente.

Un exceso de pasado puede generarnos depresión, y un exceso de futuro podría generarnos ansiedad. ¿Qué nos genera estar en el presente? Dicha, tranquilidad, atención en lo que estamos comiendo, escuchando, sintiendo, experimentando, mejores relaciones,  disfrutar más de lo que hacemos,  no dejar cosas pendientes…

Sobre todo, el presente es el momento en el que puedo preguntarme ¿En qué quiero transformar esto que estoy viviendo? Es el momento en el que puedo actuar y reconducir cada instante en la dirección en la que quiero dirigirme.

El presente es el ingrediente fundamental para sentir, para darme cuenta, para saber lo que necesito, para dar el primer paso… en cada momento de mi vida

Otro ingrediente fundamental para ponernos en acción es la confianza, seguro que te suena… ¿Sabes lo que es? A mi me gusta esta definición de confianza: “Seguridad que permite a las personas actuar libremente y generar iniciativas y desarrollo. Es el gran motor de la acción y del potencial transformador de los seres humanos. Sin confianza no hay brillo.”

A lo largo de mi vida muchas personas me han dicho que les trasmito confianza, que doy confianza, que sienten confianza cuando están conmigo…  esa es otra cosa importante que quiero que sepas de mi, que aporto y ofrezco confianza en los procesos de búsqueda de confianza en uno mismo a los que acompaño, porque yo también lo he hecho antes…

Si yo me hubiese mirado por un agujerito cuando tenía 4, 10, 19, 28, 33, 38 años… e incluso el lunes mismo, antes de saber que vamos a compartir esta experiencia en el Teatro Prosperidad el día 12 a las 11:30 h me hubiese asombrado… y… aunque no sepa cómo va a ser, qué va a pasar, cómo me voy a sentir…. Lo que tengo claro es que  quiero hacerlo, y que me siento orgullosa de tomar esta decisión sin garantías, sin seguridad… y simplemente por cómo me siento ahora… de mayor quiero ser como yo… en este momento.

¿Y quién soy yo para hablar de esto? Me llamo Esperanza… y ahora mientras escribo, siento que poco más tengo que decir de mi… me refiero a datos, a fechas, a títulos, a trabajos, a profesiones, etc… cuando a veces es precisamente esto, lo que más nos preocupa y condiciona en la vida…. ¿Qué voy a estudiar, a qué me voy a dedicar, en qué voy a trabajar, etc… todo eso son los “qués” que nos suelen posicionar en el futuro, que por el hecho de ser futuro, es incierto, y que muchas veces al estar bastante lejos de nuestro momento actual, puede generarnos angustia o ansiedad… y si eso sucede… nos estamos alejando del presente.

¿Quieres que lo compartamos? Te espero el 12 de noviembre en TheSHOWrrollo Personal. Gracias.

@EsperanzaMarco

De mayor quiero ser como yoConfianza para una vida plena.

Por Esperanza Marco de León, terapeuta y formadora.

Sábado 12 de noviembre de 2016

Horario: De 11:30 a 14:00 h.

Aunque no sepas qué quieres ser “de mayor”, ni te imagines siquiera lo que vas a vivir, ni lo que puedes alcanzar… si te gustaría sentirte orgullos@ de ti mism@ al mirar por un agujerito y verte dentro de unos días, unos meses, unos años … e incluso hoy mismo … te esperamos.

Porque es el momento de saltar, de atreverse…de eligir lo que toca. Aunque no sepas qué, ni hacia dónde vas, ni si va a salir cómo esperas o como te gustaría… TEN CONFIANZA… simplemente, da un paso, y este paso te llevará a otro, y este a otro…

Porque la vida la vives… o te la cuentan… y eres tú quien decide ser el protagonista de tu propia historia. Ven a compartirla con otros como tú, a experimentar, a aprender, a jugar, a descubrir, a vivir… en primera persona, y en plural.

Precio: 17 euros anticipada, 25 euros en taquilla.

Puedes comprar tus entradas aquí: https://entradium.com/entradas/de-mayor-quiero-ser-como-yo

Leave a Reply